Simón y yo

Después de haberle pagado a Simón toda la juerga por Europa, donde disfrutó y gozó como le dio la gana. Después que mi tío le dejará la fortuna, cuestión que esta en disputa porque Simón no respetó las estipulaciones que mi tío dejó en su testamento: como tener descendencia de apellido Aristeguieta, de respetar la majestad real y de vivir en Santiago de León, para rematar luego con lo que le hizo al hijo de Belén; se merece pues que lo estén jurungando porque bastante vaina nos hecho.

Allá ustedes que no lo conocieron bien, que no sufrieron de su soberbia y de sus insultos y de sus arrebatos.  Siganlo protegiendo.

Simon Aristeguieta-Trillos